Se llego el verano a Portland, y con su llegada arranca el desfile de las peludas! Portland - Oregon, una ciudad donde la depilación parese ser no tan popular entre un vareado grupo de feminas, o feministas como muchas se llaman y justifican su fobia a la cuchilla de afeitar. A mi la verdad mi cultura e higiene personal me hacen tan cuadriculada que no me cabe en la cabeza tanta axila peluda, y mucho menos si estan cerca a mi comida, la posibilidad de un pelo axilar en mi ensalada me enloquece. Comprendo y defiendo los parametros de liberdad e individualidad, y que puede ser decriminatorio el solicitarle a alguien depilarse las axilas y/o las piernas en orden de trabajar en cafeterias o restaurantes. Pero entonces ¿por salud publica, y estetica visual?, que tal hacer normativo que todas las personas que manipulan comidas y bebidas tengan que usar camisas manga corta durante sus jornadas laborales. Tiene sentido, ¿no? El desfile de las peludas me revuelve el estomago cada vez que...